Desde que la antigua sede de Correos de Madrid se reformó para convertirla en un centro de acceso a la cultura, las exposiciones que se han ido sucediendo han estado muy ligadas a la fotografía, algo que nos encanta y que nos indica la buena salud de la que goza esta disciplina.
Se le suma que recientemente la que fuera directora de MadridFoto desde sus comienzos, Giulietta Speranza, ha pasado a formar parte del staff en lo que viene a ser una clara apuesta por continuar con este tipo de exposiciones en la programación.
Tal como somos. Identidades cotidianas.
Comenzamos la visita en la planta más alta con una de esas exposiciones que dejan buen sabor de boca. En ella conocemos a dos fotógrafos. Por un lado Ricardo Cases, cuyo nombre no me era indiferente porque había descubierto una joyita en forma de cuadernito en la exposición sobre libros fotográficos de Alcalá de Henares.
Tiene Ricardo Cases una forma de tratar el color extraordinaria (que nos transporta al pop art), una manera de jugar con las luces que vienen del fondo en sus retratos que homogeiniza la serie y engancha, todo ello para adentrarnos en el mundo de las "bellezas de barrio" y darnos a conocer su cotidianidad.
Baylón, por otro lado, nos arranca sonrisas con cada una de sus fotografías. Su obra gusta y mucho, es algo que podía palparse en los comentarios del público que observaba las imágenes con curiosidad. "Par de dos" es el ejemplo perfecto de proyecto fotográfico.
Instantáneas robadas en la calle cuyo motivo principal es la captura de parejas. Ancianos, monjas, trabajadores con el mismo uniforme, en definitiva un catálogo de personajes anónimos que desfilan por las calles de Madrid y que es fruto de un trabajo donde la intuición y el saber mirar juegan un papel importantísimo.
Mitologías en los cielos de Madrid
Menos conceptual, por no decir nada, comparada con las exposiciones anteriores, esta muestra es un catálogo de postales sobre las esculturas que habitan en las azoteas madrileñas, algunas bajo los colores del atardecer y horas azules que aportan la magia necesaria para soñar despiertos.
Antonio Bueno, se inspira en los films Blade Runner y Cielo sobre Berlín, para llevarnos por un paseo desde las alturas. Su trabajo es correcto, algunas imágenes son muy sugerentes, pero pondría un pero, el trabajo de impresión. Al tratarse de copias a grandes dimensiones, los píxeles del cielo se hacen notorios cuando nos acercamos a las fotografías. Un detalle que debería cuidarse siempre.
Raw
Instalación de "Raw"
Alberto de Pedro y Raúl Cabello exponen en la planta tercera una instalación fotográfica que, como se explica en el texto que acompaña a la muestra, se aleja de la rigidez a la que nos tiene acostumbrada la fotografía.
No hacía falta leerlo, es algo que se palpa, que se siente al pasear entre los papeles fotográficos a gran escala colgados de las vigas del edificio. Fotografía de arquitectura para un espacio arquitectónico que nos hace experimentar la sensación de estar dentro de una realidad de acero. Porque las imágenes nos cuentan historias a través de los rincones menos transitados del mismo edificio donde están expuestas.
En resumen
Si tenéis la oportunidad de adentraros en este espacio cultural, no dejéis la oportunidad de hacerlo, sólo hay que pasar el control de seguridad y una vez dentro podréis disfrutar de una sala de lectura y de cada una de las plantas donde el disfrute de la fotografía está garantizado.
Las tres muestras terminan el 16 de septiembre, por lo que estaremos pendientes de la programación posterior. Además, podéis llevar la cámara porque el lugar es muy fotogénico, suele estar desértico entre diario y su arquitectura da mucho juego.
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