Ya sé que hablo desde la mitificación en muchos de los posts donde comento la obra de los fotógrafos que me gustan y, en el caso de Terry O'Neill, es imposible que deje de hacerlo, es imposible quedarme neutral y escribir sin expresar lo que siento cuando al entrar ayer a su exposición y pararme delante de una instantánea de Keith Richards se me erizó el vello.
¿Podría ser que la mitificación se acentúe al estar ante los "Rostros de las leyendas"? No lo tengo tan claro, aunque ayuda, porque sí es cierto que algunas escenas tomadas en los platós de rodaje, en habitaciones de hoteles e incluso en conciertos ante millones de personas, serían imposibles de captar si estuviera haciendo las fotos a personas que no estan dentro del star system. Obvio.
Hay una fuerza en la mirada y en los gestos de los actores, cantantes, grupos, modelos e incluso personajes de la política y el deporte, porque están acostrumbrados a posar pero también a no sentirse incómodos ante la presencia de una cámara que ha entrado, matizo, de forma voluntaria a su vida. Terry O'Neill pudo y puede captar su alma en reposo porque se convierte en parte de su mundo durante los días que pasa con ellos para realizar sus reportajes fotográficos.
Cómo está montada la exposición
Me fascina la capacidad de este fotógrafo para retratar momentos de espontaneidad bajo unos encuadres cautivadores, donde hay poco lugar para la estridencia salvo en casos concretos, donde todo parece fluir entre retratado y retratista en un estilo que le ha convertido en uno de los mejores autores dentro de la fotografía a las grandes estrellas.
Con su cámara de 35 mm adquirida en Fleet Street, este fotógrafo británico logró colarse como ningún otro en lo que él viene a denominar "la puerta de bienvenida hacia la fama", todo ello combinado con una presencia lo más invisible posible, mucha paciencia y discreción a la vez que grandes dotes de relaciones públicas. Sus claves. Su forma de trabajar.
Amante de la fotografía de Eugene Smith, Terry O'Neill es conocido porque retrató a Los Beatles en el patio trasero de los estudios Abbey Road para el periódico Daily Sketch, cuya tirada se agotó siendo esta la primera vez que una banda conseguía ser portada en prensa. Comenzaba la década de los 60, del swinging que también captó David Bailey, de las fotografías a los Rolling Stones, Elton Jonh o David Bowie.
Terry O'Neill durante la rueda de prensa
De ahí dio el salto, como hacen los actores, a Hollywood, consiguiendo desde mi punto de vista las mejores fotografías de toda su carrera. Y aquí sí, llamadme mitómana, pero hay primeros planos de Audrey Hepburn, Mia Farrow, Romy Schneider, Brigitte Bardot o Ava Gardner que son absolutamente maravillosos. Sin menospreciar los rostros de Orson Welles, Michael Caine o las instantáneas tan creativas como la de Sean Connery (Terry es el único que ha fotografiado a todos los agentes 007) jugando al golf en la luna, Richard Burton en la bañera o la estampa distendida entre Robert Redford (que por cierto odia la presencia de cámaras de fotos) y Richard Helms en un descanso de un rodaje en Nueva York.
El listado de personajes es tan extenso, que podría hacer de este post una historia para nunca acabar, además de la calidad de todas estas fotografías, más de 60, que han sido fruto de una muy dificil selección por parte del equipo curatorial encabacezado por Cristina García de Albornoz.
Mis fotografías elegidas de Terry O'Neil
No todo va a ser fruto de mi devoción, reconozco que aquellas de la realeza y la política, creativamente me parecen más flojas precisamente por esa impronta de los personajes retratados, no me imagino a Margaret Thatcher posando en una bañera o a la Reina Isabell II de Inglaterra jugando al golf en un decorado de unos estudios de cine.
Pero sí voy a comentar algunas de esas fotografías que ya forman parte de mi colección particular de imágenes que me han hecho vibrar. Por ejemplo, la luz en el posado de Christy Turlington, Paul McCartney tocando el piano en la boda de Ringo Starr, la belleza felina en la mirada de Ava Gardner captada de forma soberbia, Audrey Hepburn relajada en una tumbona con una luz blanca iluminando la escena que la convierte en etérea o Elton John sobre el escenario del Dodgers Stadium ataviado con un excéntrico traje de beisbol que se confunde con la multitud del público.
Hablando sobre Amy Winehouse, una de las fotografías expuestas en esta muestra
En resumen
Como dato curioso y para terminar, quiero recalcar porque así se hizo durante la rueda de prensa y porque creo que es algo en cierto modo histórico, en esta exposición se presenta por primera vez la fotografía tomada recientemente a Pelé la cual será la imagen del Mundial de Fútbol de Brasil en 2014.
Por lo demás, mucho que añadir porque cuando cine y fotografía se unen a mí me da por excederme más de lo debido, pero quiero concluir con una invitación a que no dejéis de ver esta muestra, sé que a todos los amantes del pop y del Hollywood más genuino os va a emocionar y sin más, cierro el telón como lo hizo Marlene Dietrich en su última aparición en un escenario, en lo que a mí me habría supuesto un desmayo instantáneo pero que Terry O'Neill supo captar como él sólo sabe hacer. Disfrutadla.
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