¿Debemos revelar nuestros archivos RAW cada vez que cambia el software?

¿Debemos revelar nuestros archivos RAW cada vez que cambia el software?

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¿Debemos revelar nuestros archivos RAW cada vez que cambia el software?

Hace pocas semanas se ha actualizado Adobe Photoshop con un nuevo motor de revelado. También han mejorado Capture One, Luminar... Ocurre prácticamente cada año. Cada nueva versión consigue mejores resultados que la anterior. Y nosotros hemos revelado nuestras fotografías con más o menos esfuerzo con versiones antiguas. ¿Merece la pena volver a hacerlo? ¿O las dejamos como están?

A lo mejor nunca os lo habíais planteado. Cualquier fotografía que revelasteis hace cinco, ocho, doce años... seguro que mejora si pasa por las nuevas versiones de cualquier programa. Siempre decimos que cómo me hubiera gustado hacer esta foto con la cámara nueva o con el objetivo luminoso que tienes ahora. Pero pocas veces oigo revelar una fotografía con el nuevo Photoshop o el Capture One.

Cambioiv Revelada con la última versión desaparece el ruido

Y lo digo porque el resultado final puede cambiar una barbaridad. Luego viene el tema del cambio de gustos o de estilo a la hora de revelar nuestro trabajo. Todo viene al contemplar mis fotografías más antiguas, con cámaras peores, cuando las revelo con la tecnología actual y hago la comparación entre ambas interpretaciones. No solo han cambiado mis conocimientos o se ha afianzado mi estilo. Ha cambiado el motor de revelado. Y es una de las cosas que más se nota. En serio.

¿Merece la pena revelar de nuevo nuestras fotografías? La tecnología

Si nos centramos en la técnica creo que es fundamental revelar de nuevo nuestras fotografías según va mejorando la tecnología. Es impresionante percibir cómo desaparece el grano o mejora la reproducción de las luces por revelar con el Camera RAW original o con el que tenemos ahora instalado.

Revelar con la versión 1 del motor de procesado o con la versión 5 supone una serie de mejoras importantes. Y por supuesto todo puede cambiar más si elegimos otro programa. Igual se puede llegar a conseguir los mismos resultados pero con los controles de las últimas versiones es más sencillo llegar a la fotografía final:

  • Reducción de ruido.
  • Mejor tratamiento del color.
  • Un mayor control de las luces y las sombras.
  • Una mejor acutancia.

Para el ejemplo he trabajado con una de mis primeras fotografías digitales. En lo alto del Naranjo de Bulnes, con una Canon EOS 300D y el famoso y entrañable 18-55. La primera versión dejaba el cielo blanco, sin aparecer el mar de nubes por ningún lado. Todavía recuerdo con sudores todo el trabajo que me supuso conseguir el aspecto de la imagen de la derecha. Ahora con seguir los pasos adecuados la imagen puede darse prácticamente por terminada.

Cambioii La misma fotografía con dos versiones de Camera RAW

Visto lo visto es muy recomendable adaptarse a los nuevos algoritmos más que nada para conseguir lo que estamos buscando con muchas menos complicaciones. Y lo mismo que sucede con los programas de Adobe pasa con todos los demás. Los archivos, desde un punto de vista técnico, mejoran una auténtica barbaridad.

¿Pero está bien cambiar el revelado de nuestras fotografías? La ética fotográfica

Este tema es más complicado, sobre todo para los fotógrafos que buscan un estilo más personal. A la hora de revelar tenemos que estar seguros de lo que queremos. Cuando terminamos una copia, tenemos que estar seguros de que lo que vemos es lo que queremos.

Pero esta forma de actuar no parece muy acorde con lo que estamos proponiendo. No tiene sentido cambiar una imagen en el futuro porque hay un programa mejor. Lo importante es tener claro lo que tenemos e intentar conseguirlo con nuestros medios. Y si lo que hicimos no nos gusta, el mejor camino puede que no sea repetir el revelado, sino hacer nuevas fotografías.

Otra cosa distinta es que trabajemos con fotografías sueltas. Si hacemos paisaje puede que nos beneficie mucho sacar adelante un archivo que se nos resistió en el pasado. A lo mejor las sombras las podemos recuperar sin tanto ruido y el resultado final será mejor.

Cambioiii El cambio es evidente

La revisión de nuestros disparos puede ser buena idea, sobre todo para limpiar los defectos de nuestra juventud. Cuántas veces hemos visto nuestras fotografías pasadas con efectos que hoy nos sonrojan. Lo importante es reinterpretar lo que hicimos en el pasado para mejorar. Pero si alguna fotografía ha formado parte de una serie, o la hemos expuesto o ganado un premio con ella, está bien así.

De hecho, cuando cambiamos de motor de procesado, el propio programa intenta dejar el archivo lo más parecido posible a lo que habíamos conseguido. Incluso mantienen todas las versiones para poder mantener el mismo aspecto sin importar el paso del tiempo.

Todo nuestro esfuerzo deberá ir a mejorar en el futuro. Y el pasado dejarlo donde está. Siempre pongo de ejemplo a José Manuel Navia que hizo la transición del químico al digital de forma maestra. Hoy es imposible saber cuál de sus obras es de una época u otra. Él es fiel a su estilo y le da igual la tecnología. Esa es la clave. Aprovechar las novedades para mejorar nuestra forma de ver.

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