Dicen los que lo conocen que el ucraniano es un pueblo luchador y valiente que no dudará en defender aquello en lo que cree. Una prueba irrefutable de su carácter heroico es el «partido de la muerte», un encuentro futbolístico que tuvo lugar en 1942, en la Kiev ocupada por los nazis, y que enfrentó a un equipo formado por ex jugadores profesionales ucranianos con otro de la Wehrmacht nazi.
A pesar de saber que si vencían les esperaba el peor de los finales, los jugadores ucranianos ganaron el partido. Algunos historiadores aseguran que los nazis no dudaron en torturarlos y enviarlos a campos de concentración para evitar que su victoria en el terreno de juego pudiese ser tomada como un revulsivo por la sociedad ucraniana.
Kiev y el pueblo ucraniano en su conjunto vuelven a estar de plena actualidad. Y, desafortunadamente, no se debe a la belleza de sus edificios históricos, la grandiosidad de sus monumentos o la majestuosidad de su entorno natural, tres cualidades que este time lapse refleja a las mil maravillas.
Su autor, Oleg Finger, lo ha concebido como un retrato audiovisual de una ciudad orgullosa de sí misma y del pasado que la ha permitido erguirse como lo hace en la actualidad. Hoy, más que nunca, este vídeo, al margen de su calidad estrictamente técnica, que es muy alta, merece los escasos tres minutos de nuestro tiempo que nos reclama. El tema de carácter épico que lo acompaña le viene que ni pintado.
Vídeo | Vimeo En Xataka Foto | Wyoming Wildscapes II, la majestuosidad de la naturaleza condensada en un espectacular time lapse
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