Como adelantábamos hace una semana, la cita anual con la muestra de World Press Photo ya se encuentra en Madrid, gracias a Canon y al Círculo de Bellas Artes que presta una de sus salas para que podamos ver en vivo todas aquellas fotografías que han sido premiadas en la última edición de este prestigioso concurso.
Gracias a este concurso y a su exposición, que se pasea también por otros lugares repartidos por el globo, podemos acercarnos a la obra de grandes fotoperiodistas que publican en las más prestigiosas publicaciones de todo el mundo. No es difícil encontrar entre los premiados, fotografías que han sido vistas desde el New York Times al National Geographic. De ahí la riqueza de esta exposición y de su importancia a todos los niveles.
Como cada año, la impresión de las fotografías y la edición en cuanto a tonalidad y acabado es la misma para todas, haciendo que de esta manera se homogeneice el conjunto y sólo destaquen por lo que cuentan y cómo lo cuentan. En mi caso y como en cada visitante que vaya a verla, tengo mis favoritas, motivada sin duda porque aportan un punto de originalidad frente al resto.
Las fotografías más interesantes de World Press Photo
Por tanto, puestos a comentar aquellas que han llamado mi atención, comenzaríamos por la sección de deportes la cual siempre nos ofrece un plus de espectacularidad y puntos de vista muy atrayentes visualmente. Es el caso de la imagen de Jeff Pachoud, con una instantánea preciosa de un paisaje nevado que hace que reflexionemos sobre la capacidad de un fotoperiodista para convertir una fotografía de deportes en un producto sumamente bello y artístico.
También hay una imagen muy interesante de Al Bello sobre un partido de tenis, instantánea a la cual le ha ha dado una luz muy escénica que hace que giremos la mirada al pasar por delante de su pequeña muestra. Como también curiosa en cuando no presenta escenas de deporte propiamente dichas, es la serie sobre la deportista Nadja Casarei a la cual Peter Holgersson le hizo un reportaje tras el diagnóstico de cáncer y su proceso de la enfermedad.
En cuanto a reportaje sobre vida cotidiana, me impactó una imagen muy íntima de una familia en el momento de lloro por la muerte de un teniente del ejército sirio. Tomada por Andrea Bruce, la expresión de serenidad con lamento en el rostro de los afectados y la cercanía con la cual nos la presenta, nos hace formar parte de ese momento.
Y ya que hablamos de ser partícipes de las fotografías, por ese acercamiento del fotógrafo a las escenas que fotografía las cuales traspasan el objetivo para hacer que nos sintamos dentro de las mismas, podemos destacar a Rahul Talukder por las imágenes de un derrumbamiento de un edificio en Bangladesh; las de Sara Naomi Lewkowicz sobre un caso de violencia doméstica; o cambiando de tercio las de Marcus Bleasdale que prácticamente nos sitúa en un barco de pesca noruego haciendo que sintamos la sensación de vaivén por las olas en la cubierta.
Una de las series que, aunque es igualmente desoladora, nos presenta la violencia simplemente a través de las ropas de gente que ha sido asesinada en un discurso mucho más conceptual, es la de Fred Ramos, destacando por tanto ya que no nos ofrece imágenes de dolor tan directas como otros ejemplos que pueden verse en la muestra.
Mención especial del jurado a una serie que no fue desarrollada por ningún fotógrafo pero que cubría un suceso en primera persona por una familia que sobrevivió a un incendio en Tasmania, y que están en la muestra compartiendo pared con fotos que se han hecho ya icónicas como la del tiroteo en un centro de comercial en Nairobi por Tyler Hicks; una de las tomadas en la Isla Leyte (Filipinas) por Philip Lopez tras el huracán; o la ya mítica fotografía de John Stanmeyer que encontramos nada más entrar en la sala.
En resumen
Una exposición necesaria para conocer al ser humano y al mundo que nos rodea, que hace no podamos apartar la mirada frente a aquellas situaciones de dolor, pero que al mismo tiempo se hace indispensable a nivel fotográfico para recordarnos porqué esta profesión es tan importante. No dejéis de verla. En el Círculo de Bellas Artes de Madrid hasta el 12 de octubre. Y si no podéis acercaros, también podéis acceder a las fotografías a través de la web de World Press Photo.
Más información | World Press Photo Imagen de portada | Philip Lopez Fotografías cedidas por | World Press Photo