Los autorretratos de Alberto García-Alix, después de haberse materializado en forma de libro y haber hecho un periplo gracias a varias exposiciones por medio mundo, llega por fin a Madrid para cerrar un festival de PHotoEspaña que no podría entenderse sin una muestra individual del fotógrafo más reconocido (junto a Chema Madoz) de todos cuantos contamos en España. Es así y no podemos negarlo.
"Autorretratos" es una recopilación de 72 fotografías que recogen su lado más íntimo, basadas en propios retratos de sí mismo no sólo porque aparece su figura sino porque en algunas recoge parte de lo que es él, de su esencia como persona y como fotógrafo, la de un autor que pese a contarnos que sentía vergüenza con todo este proyecto que sin embargo le está dando tantas satisfacciones, ha sido siempre uno de los pocos autores cuya vida la hemos conocido a través de su obra.
Por ello no nos sorprenden esos autorretratos de sus brazos con jeringuillas, ni la cama deshecha junto a la mujer que ama, ni su pasión por el mundo de la moto y la estética de las chupas de cuero, ni tan siquiera el reflejo de su yo más interno con el rostro mirando a cámara aun tapado por máscaras. García-Alix tiene ese don para experimentar fotográficamente usando su ser como protagonista. En este sentido posee una colección de los mejores autorretratos que ha dado la historia de la fotografía en España. Es así y no podemos negarlo tampoco.
No es un acto ególatra, es la forma que tiene de entender el medio fotográfico, que lo utiliza como canalizador de sus propias experiencias vitales, que se exponen al público sin velos, que son reflejo de su propia verdad y de su propia vida. Pertenece a ese tipo de fotógrafos que, como Diane Arbus, cada pedacito de su alma queda reflejado en cada grano de película. Eso es lo más apasionante que nos aporta Alberto García-Alix como creador y lo que le ha valido el reconocimiento tanto nacional como internacionalmente a lo largo de toda su carrera.
Podemos decir que esta exposición recoge nuevo material junto a otro que ha formado parte de otras exposiciones, muchas imágenes ya las conocemos pero seguimos sin cansarnos de verlas, y que se completan con una de sus piezas en vídeo más personales que haya realizado, que ya hace muchísimos años tuvimos ocasión de conocerla a través de la muestra realizada en la galería Juana de Aizpuru, y que nos muestra una sucesión de imágenes con su voz en off bajo el título "De donde no se vuelve". Poéticamente imprescindible. Al igual que los títulos que acompañan las fotos.
La muestra, que se inaugura esta tarde, estará abierta al público hasta el 28 de septiembre en la Sala Picasso del Círculo de Bellas Artes de Madrid. Por la repercusión que se generará en torno a ella, auguramos va a recoger gran afluencia de público aún estando metidos de lleno en temporada estival. Pero es García-Alix en estado puro, el taquillero de las exposiciones. No podemos negarlo.
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