Vende más en Microstock: 7. Optimiza el etiquetado de tus fotografías

Vende más en Microstock: 7. Optimiza el etiquetado de tus fotografías
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Después de seis artículos del especial “Vende más en Microstock” en los que hemos visto desde donde encontrar inspiración para nuestras fotografías de stock hasta cómo adaptar nuestras fotografías para que se vendan más, vamos a ver ahora cómo etiquetar una fotografía para mejorar su posicionamiento en las búsquedas.

El etiquetado o keywording de una fotografía es posiblemente una de las etapas más importantes en el proceso de creación de una fotografía para microstock. Se trata de añadir un título, una descripción y algunas palabras clave que harán más o menos visible nuestra fotografía.

Antes de continuar, debemos tener claro que el etiquetado de una fotografía es algo sobre lo que se ha discutido mucho, si convienen más o menos palabras clave, qué palabras clave poner, etc. Con el tiempo he ido experimentando con el etiquetado de las fotografías, desde poner menos de diez palabras clave, hasta llegar a las cincuenta. A continuación os comentaré lo que mejor me está funcionando a mí y a otras personas con las que he hablado sobre el tema. Vamos a ver además algunos ejemplos.


Existen diferentes formas de añadir etiquetas a la fotografía, podemos hacerlo desde Adobe Photoshop, Adobe Lightroom, desde herramientas gratuitas como ProStockMaster o directamente desde la agencia una vez subidas las fotografías. Cada uno puede escoger el método que le parezca más sencillo, pero mi consejo es etiquetar directamente el archivo fotográfico en el ordenador y no hacerlo en cada agencia.

El título y la descripción

Foto de Diego Rayaces en nuestro grupo de Flickr

Según tengo entendido, sólo el motor de búsqueda de Dreamstime utiliza el título y la descripción para ofrecer sus resultados. Entonces ¿Por qué deberíamos complicarnos la vida poniendo un buen título y una buena descripción a nuestras fotografías si al fin y al cabo no las utilizan?

Además de ser obligatorio en la mayoría de agencias, el título y la descripción ayudan a los compradores a conocer un poco mejor qué es lo que están comprando. Un paisaje típicamente mediterráneo puede estar situado tanto en España como en Grecia sin grandes diferencias en la fotografía y sin embargo el comprador puede que esté interesado en un paisaje que realmente esté en uno de los dos paises, podemos aclarar donde fue tomada la foto a través de la descripción.

Parece que entonces, si nuestra foto está hecha en España y el comprador quiere una de Grecia, perderemos una venta. Cierto, pero si no indicamos que se trata de España, ni el comprador que busque una foto de Grecia ni el que busque una de España querrán comprar nuestra fotografía al no poder estar seguros de que realmente esa foto fue tomada en ese pais.

Además de esto, el título y la descripción ayudan a los motores de búsqueda externos a la agencia (por ejemplo Google) a encontrar nuestras fotografías. Algunos compradores realizan la búsqueda desde un servicio externo ya que así amplían mucho el número de fotografías y después ya eligen la mejor, independientemente de en qué agencia se venda.

Para el título nos bastan una o dos palabras, no es necesario extendernos demasiado, podríamos titular la fotografía de arriba como “Catedral”. En la descripción aprovecharemos para dejar claro qué es lo que podemos ver en la foto. Algunas agencias nos piden que no nos extendamos demasiado en la descripción, por lo tanto escribiremos lo necesario y más importante. Por ejemplo: “Catedral de Córdoba, Argentina, también conocida como Iglesia de Nuestra Señora de la Asunción, iluminada al anochecer. A la derecha de la imagen el Cabildo”.

¿Qué palabras clave utilizo?

Foto de Jordi Martin en nuestro grupo de Flickr

El proceso de etiquetado puede hacerse complicado y confuso si no intentamos seguir un orden, sencillo, pero que nos ayude a repasar la fotografía intentando encontrar las palabras clave más relevantes para ésta. Lo que hago es establecer mentalmente tres fases para el etiquetado.

  • Primero lo que vemos: Vamos a mirar la foto y escribiremos el nombre de los objetos, personas, animales o plantas que aparezcan. Desde palabras genéricas hasta más específicas. En la foto del ejemplo podríamos poner: Mujer, chica, persona, joven, libro, parque, exteriores, lectura, jardín. No hace falta poner palabras como collar o camiseta ya que son irrelevantes en esta fotografía.

  • Después los conceptos: Ahora echamos otro vistazo a la fotorafía. Nosotros habremos tomado la imagen con una idea en la mente, pero al revisar algunas imágenes veremos que encajan también en otros conceptos. En la foto de ejemplo: Juventud, espera, tranquilidad, ocio, tiempo libre, relajación, soledad. Sin embargo no encajarían conceptos como cultura o romántico por muy cultural y romántico que pueda parecernos esperar a nuestra pareja en el parque leyendo un libro.

  • Y para terminar los detalles técnicos: Son las palabras que pueden ayudar a algunos compradores a limitar los resultados de búsqueda a sus necesidades técnicas. En el ejemplo podríamos añadir: Horizontal, color, luz del día, contraluz, diagonal. Obviamente es irrelevante la velocidad de obturación, diafragma, ISO y todos estos detalles más técnicos.
  • Lo más importante es no añadir palabras clave falsas o que no tengan nada que ver con la fotografía. No nos ayudarán a vender mejor nuestras imágenes y sin embargo pueden molestar a los inspectores y provocar rechazos o penalizaciones en algunas agencias. Después del etiquetado es mejor guardar las fotografías en una carpeta que podemos llamar “Revisión de palabras clave” en lugar de subirlas inmediatamente a las agencias.

    ¿Cuantas más palabras clave mejor?

    Foto de EvaMagenta en nuestro grupo de Flickr

    La mayoría de agencias permiten hasta 50 palabras clave. El problema es que cada una de las palabras que añadimos a una fotografía tiene la misma importancia que las demás, por lo que cuantas más palabras añadamos, menor relevancia tendrá cada una de ellas.

    Pongamos que por ejemplo el valor total de las palabras clave de una imagen es 100. Si escribimos 50 palabras, el valor de cada una de ellas será de 2 (100/50=2). Sin embargo si utilizamos sólo 25, cada palabra pasa a valer 4. De acuerdo, muy entretenidas las matemáticas, pero eso que quiere decir.

    Lo que quiero decir es que si un comprador busca “Manzana” y ordena los resultados por relevancia, aparecerán primero las fotografías con 25 palabras entre las que se encuentre “manzana” que las fotografías con 50 palabras clave. ¿Entonces cuantas menos palabras clave mejor? Si pero no.

    Lo mejor es escribir el mínimo de palabras clave necesarias para que todo lo relevante de una fotografía esté descrito, sin olvidarnos nada pero sin añadir palabras por las que un comprador que buscara eso en concreto, no se fijaría en nuestra fotografía. En el ejemplo no haría falta añadir “textura” aunque el fondo de la imagen tenga una textura interesante ya que ningún comprador que esté buscando texturas se decidirá por nuestra foto.

    En principio con unas 20 o 30 palabras clave debería bastarnos para etiquetar la mayoría de nuestras fotografías. En algunas puede que necesitemos más y en otras puede que nos baste con sólo 10.

    Repasa bien las palabras clave

    Foto de Pedrisho en nuestro grupo de Flickr

    Os decía que después de etiquetar vuestra fotografía la guardaseis en la carpeta “Revisión de palabras clave”. El motivo es muy sencillo. Conociendo la importancia del etiquetado de las fotografías, merece la pena revisar que no nos hayamos olvidado ninguna palabra relevante o se nos haya pasado alguna innecesaria.

    Podéis revisar la lista de palabras clave más buscadas en las agencias para comprobar si alguna de éstas encaja en nuestra fotografía. Esto nos ayudará a aparecer en más resultados de búsqueda, eso sí, entre una gran competencia.

    Además, podemos utilizar la herramienta de etiquetado que nos ofrece Yuri Arcurs en su web para completar nuestro trabajo. Comprobamos cuales son las palabras más utilizadas en fotografías semejantes a la nuestra y repasamos que no nos hayamos olvidado ninguna. Después vamos al final de la lista y buscamos alguna de las menos usadas y que sea relevante para nosotros. De esta forma apareceremos en resultados de búsqueda con menor competencia.

    En resumen


    Pese a la importancia que tiene el etiquetado de una fotografía, tampoco debemos obsesionarnos con el tema. Como hemos visto, siguiendo un pequeño esquema a la hora de etiquetar y repasando después las palabras clave, la tarea se puede agilizar y es difícil que nos olvidemos de palabras clave importantes.

    Si dudamos si añadir o no una palabra, mi consejo es no añadirla ya que si estamos dudando es porque posiblemente no nos ayudará en nada y restará importancia al resto de palabras. Mentir no suele servir de nada en la vida y el etiquetado de una fotografía no es una excepción. iStock es muy exigente en cuanto al etiquetado correcto, llegando a rechazar fotografías realmente buenas a causa de un mal etiquetado o por añadir simplemente una o dos palabras que no tienen mucho que ver con la imagen.

    Aunque lleve mucho trabajo, con el tiempo uno se acostumbra a buscar palabras relevantes en cada fotografía y va haciéndose más fácil día a día. Acordaros que la mayoría de agencias sólo admiten palabras clave en inglés, por lo que lo mejor es etiquetar el archivo JPEG directamente en inglés para que al mandar la foto a la agencia ya detecte esas etiquetas en los metadatos de la imagen.

    Foto de portada | agm92 en nuestro grupo de Flickr
    En Xataka Foto | Vende más en microstock

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